Bajo la dirección de Alfredo Sanzol, el equipo creativo que colabora habitualmente con el director de escena se reunió los días 24, 25 y 26 de noviembre en torno a la tragedia Edipo Rey. En esa ocasión nos acompañó Greg Hicks, actor de la Royal Shakespeare Company, que quiso compartir con nosotros su experiencia en el trabajo actoral de los clásicos griegos.
Durante una mañana nos habló de la intensidad de la interpretación, de la indulgencia, del profundo sentido de la ironía, de la verdad… Y siempre, con Edipo en el centro de todo… “Para hacer este tipo de obras es necesario que nuestro cuerpo entero esté implicado, de los pies a la cabeza. Como actores tenéis que estar en el escenario con total intensidad, sin indulgencia, con un profundo sentido de la ironía y siendo totalmente verdaderos, en cada momento, en cada segundo”, explicaba el actor británico.
Después aprovechamos otras dos jornadas para sentarnos a la mesa y seguir trabajando, hablando, opinando y escuchando… Y también tuvimos tiempo para leer y escuchar, en la voz de sus actores, las primeras versiones de la adaptación de Alfredo Sanzol, que nos decía que Edipo representaba la quintaesencia del sufrimiento humano. Incesto, asesinato, peste, ceguera…
En Edipo, los personajes caminan hacia la verdad, como si el destino estuviera tirando de los personajes como un tren: “No puedes bajarte de ellos, estas obras son rituales, ahí está el gran problema: Cómo traducir esos rituales en el siglo XXI es peligroso, difícil… Porque al final Edipo es una obra sobre la verdad escondida. La liberación de Edipo coincide con su propia destrucción, y esa paradoja es genial”.
Y el taller acabó con una pregunta de Alfredo Sanzol: “Siempre me he preguntado por qué hago teatro, para qué abordar esta tragedia… Y no sé para qué lo hago, no lo he sabido nunca, pero lo que sí sé es que quiero contar algo”.